01 junio 2008

Soy curiosa: socialismo erótico

Jag är nyfiken. Suecia, 1967-68.

Director: Vilgot Sjöman

Intérpretes: Lena Nyman, Vilgot Sjöman, Börje Ahlstedt

Temáticas de interés: liberación sexual, amor libre

Sinopsis:

Lena, una joven idealista, milita en distintas causas y pregunta a los suecos su opinión acerca de varios asuntos sociales y también sexuales. Su vida erótica y afectiva se divide entre Vilgot, el director que filma sus actividades como militante, y un hombre padre de un hijo.

Comentario:

La mezcla de realidad y ficción de Soy curiosa resuelta de lo más actual; como harían veintitantos años más tarde Victor Erice o Abbas Kiarostami, Vilgot Sjöman construye una película de ficción que trata sobre la filmación de un documental sobre la sociedad sueca y el sexo. No existe un guionista acreditado puesto que probablemente los actores, que se interpretan a sí mismos, incluyendo al propio director, toman una parte activa, como mínimo, en el diseño de unos personajes que no podemos saber hasta qué punto son ellos mismos o no. Es de suponer que Lena, la protagonista, desarrolla en la vida real la actividad de denuncia de desigualdades y defensa del feminismo y la libertad social y sexual que le vemos llevar a cabo durante el film. Y es de suponer también que ella y el director forman una pareja abierta como la que se ve en la pantalla.

En otra entrada del blog hablé de Encuesta sobre el amor, un documental de Pasolini muy similar por su recopilación de opiniones de gente de la calle respecto a temas sexuales, pero Soy curiosa aporta un juego metalingüístico mucho más audaz y deja totalmente de lado la supuesta neutralidad del film de Pasolini (sólo supuesta, porque el director deja muy claro su punto de vista sobre las cuestiones que se plantean) y asume que se trata de un film de denuncia y de todo un manifiesto político que plantea interesantes preguntas como por ejemplo si el incipiente turismo sueco en España durante la época ayuda a los españoles o si supone una complicidad con la dictadura franquista.

Vista hoy en día, resulta también un film muy didáctico sobre los años 60, la contracultura y el cuestionamiento de muchos valores que hasta entonces, y por desgracia también en la actualidad, se consideraban y se consideran inamovibles. Por entonces no se daba por hecho como se hace ahora que la sociedad siempre sería desigual sino que durante años se hizo un esfuerzo importante por disminuir la brecha que separa a los ricos y los pobres, y el mismo espíritu contestatario se aplicó también a la sexualidad. Como herencia de aquellos años, la homosexualidad (que Lena también explora manteniendo relaciones con una chica), la masturbación o el deseo sexual femenino han dejado de considerarse desviaciones para pasar a verse, al menos en el mundo desarrollado, con cierta normalidad. No obstante, en otras cuestiones, como un concepto de pareja basado en vínculos intelectuales y afectivos y no solamente ni necesariamente en la fidelidad sexual, Soy curiosa resulta hoy, tal vez más que nunca, un film muy audaz por plantear el aprendizaje sexual de una chica que mantiene relaciones con dos hombres a la vez, sin que ellos se consideren dueños de ella por ser sus amantes, un comportamiento que hoy sólo cabe considerar anacrónico.




Escenas destacadas:
  • Lena pregunta a varios transeuntes acerca de la diferencia de clases sociales en Suecia, si la sociedad sueca es clasista o no; uno de los entrevistados responde: si estamos desnudos no hay diferencias de clase; viste a la gente y ya tienes una sociedad clasista.
  • La joven y un compañero de militancia deciden asaltar una iglesia y enfrentarse con el obispo, al que despojan de su sotana y dejan en calzoncillos en una especie de performance.

Anécdotas:

  • Produjo una extraordinaria polémica en su estreno internacional, especialmente en Estados Unidos, donde llegó a estar secuestrada por la censura y no pudo estrenarse más que después de una sentencia judicial. Se la consideró pornográfica en su día y el director lee en la segunda parte de la película los insultos y amenazas contenidos en algunas cartas recibidas por espectadores indignados tras haber visto el primer capítulo.
  • En España, debido a sus críticas al franquismo, no pudo ser estrenada hasta 1978, tras la muerte del dictador.
  • La película está dividida en dos partes con los nombres de los dos colores de la bandera sueca: Soy curiosa azul y Soy curiosa amarillo, que se estrenaron en su día de forma separada y ahora se han editado en vídeo de la misma manera.

Sobre el director:

Vilgot Sjöman (1924 - 2006) nació en una familia de clase trabajadora de Estocolmo; tras conseguir una beca, pudo estudiar cine en Estados Unidos y empezar a desarrollar una carrera como escritor y director. Durante los años 60 y 70, tras colaborar con el principal cineasta sueco de la época, Ingmar Bergman, en Los comulgantes, llevó a cabo una serie de películas con temas provocativos, como incesto, homosexualidad y violación, que culminan con su mayor éxito y escándalo internacional, Soy curiosa. Más adelante sus films dejarían progresivamente de estrenarse en el extranjero y Sjöman se centró en trabajos para la televisión sueca.

Enlaces:

IMDB
La Butaca

No hay comentarios: